La Policía Local de Palma detuvo a un ladrón gracias al aviso de un niño de once años y la colaboración ciudadana. El arrestado es un rumano de 36 años y se le imputa una tentativa de robo con fuerza.
El suceso tuvo lugar sobre las 20.30 horas del domingo en la calle Pablo Sarasate de Palma. Un niño de 11 años que jugaba a futbito vio a dos ladrones saltar al interior de una planta baja. El menor fue corriendo hasta un bar cercano donde se encontraba un vecino suyo que sabe que es guardia civil para avisarle.
El agente, que estaba fuera de servicio, acudió a la planta baja junto a otros vecinos. En la vivienda encontraron al rumano, que había saltado por la terraza y había forzado una caseta del jardín y la puerta de la cocina para acceder al interior de la casa.
El dueño de la planta baja sorprendió también al ladrón dentro. Entre el agente y los vecinos retuvieron al rumano hasta que se personó la Policía Local, que lo detuvo. Su cómplice logró escapar.