Agentes de la Policía Nacional y de la Policía Municipal de Madrid han desmantelado una destilería ilegal de licores ubicada en una nave industrial de Madrid, ha informado la Jefatura Superior de la Policía de Madrid en una nota de prensa.
En el operativo han sido imputadas 24 personas por un delito contra la salud pública y se ha procedido a la incautación de más de 2.100 litros de alcohol elaborados fraudulentamente, de los que casi 1.500 se encontraban ya en establecimientos de restauración listos para su consumo por los clientes.
Las bebidas eran fabricadas de manera clandestina en condiciones insalubres y se distribuían posteriormente sin el etiquetado legalmente exigido y eludiendo, además, el pago de los impuestos especiales a los que están sometidos estos productos. Los licores contenían aditivos alérgenos sin advertencia de ningún tipo, con el grave peligro que esto puede suponer para los consumidores.
La investigación comenzó cuando la Policía Municipal de Madrid comunicó a los agentes de la Policía Nacional la existencia de varias personas que estaban distribuyendo licores ilegales fabricados de manera clandestina en Madrid.
Una vez conocida esta información, se realizaron indagaciones que permitieron constatar que se estaba llevando a cabo esta actividad y determinar la existencia de, al menos, cinco sujetos que estarían distribuyendo las bebidas a 25 locales de Madrid.
Posteriormente, los investigadores identificaron al responsable de la producción ilegal, a quien le intervinieron 42 garrafas que contenían distintos tipos de licores sin ningún tipo de etiquetado y que carecían de los requisitos exigidos por la normativa vigente.
Sin precintos ni medidas higiénicas
Comprobada también la ausencia de precintos en el alcohol, como exige la normativa sobre impuestos especiales, los agentes comunicaron los hechos la Agencia Tributaria en Madrid, para contar con su participación en el operativo.
Por otro lado, al no constar tampoco la relación laboral que el productor de la bebida mantenía con los distribuidores, los investigadores contactaron con Inspección de Trabajo, del Ministerio de Empleo y Seguridad Social, para que hiciesen las averiguaciones oportunas.
Por último, el operativo contó también con la participación de la Dirección General de Ordenación e Inspección al objeto de acreditar de forma definitiva la existencia de un delito contra la salud pública.
Una vez coordinado el operativo se desplegaron cuatro equipos: dos en Madrid capital, uno en la localidad de Valdemoro y el último sobre la red de distribución, con el objetivo de retirar del mercado la bebida ilegal que ya se encontraba lista para su consumo. Finalmente, se desmantelaron tres naves industriales así como la destilería ilegal y se inspeccionaron 25 locales de restauración.
Las actuaciones desarrolladas han permitido imputar a 24 personas un delito contra la salud pública, así como la intervención de 2.132 litros de alcohol elaborado de forma fraudulenta, de los cuales 665 estaban dispuestos para su distribución y el resto, 1.435 litros, se encontraban preparados para la venta en los establecimientos de restauración inspeccionados.
La operación ha sido realizada por agentes de la Sección de Vigilancias y la Sección de Consumo, Medio Ambiente y Dopaje de la UDEV Central, en colaboración con la Unidad Central de Seguridad 1 de la Policía Municipal de Madrid, el Servicio de Vigilancia Aduanera, la Dirección General de Ordenación e Inspección de Madrid y la Inspección de Trabajo del Ministerio de Empleo y Seguridad Social.