Los investigadores han concluido que Juan Manuel Ruiz Fortuny, el hombre de 40 años que desapareció durante una excursión por las inmediaciones del santuario de Lluc, cayó de espaldas desde seis metros de altura y la muerte le sobrevino en el acto.
La causa de la muerte, al parecer, fue un traumatismo cráneoencefálico severo, aunque el cadáver presentaba otros golpes y hematomas ocasionados durante la caída. Según la reconstrucción parcial del accidente llevada a cabo por la Policía Judicial de la Guardia Civil, se desprende que el excursionista, que había acampado el domingo con su mujer y sus dos hijos de seis y doce años, cayó entre un árbol y una roca, lo que lo dejó oculto y provocó que su cuerpo no se encontrara hasta el viernes.
Juan Manuel se dirigió a la finca pública de Menut porque quería ver el vuelo de los voltors. Una vez en aquella propiedad trepó al paraje conocido como el Coll Pelat y en un risco de unos seis metros le sobrevino el accidente.