El oficial de policía del estado estadounidense de Carolina del Sur Michael T. Slager ha sido acusado de asesinato por la muerte a tiros de Walter Scott, un ciudadano afroamericano de 50 años que fue alcanzado por ocho disparos en la espalda cuando trataba de huir.
Los cargos que se imputan al agente se basan en una grabación que demostraría, según el alcalde de la localidad de North Charleston, la «mala decisión» tomada por el oficial.
En las imágenes se puede ver cómo el policía tirotea por la espalda en múltiples ocasiones a la víctima, que trataba de huir. El agente aseguró que actuó de esa manera porque temía por su vida, después de que la víctima le quitase su arma de aturdimiento en un forcejeo.
La disputa se habría iniciado –según la versión del agente- cuando paró el vehículo del ciudadano afroamericano porque éste llevaba una luna rota.
Sin embargo, las imágenes grabadas por un transeúnte ponen de manifiesto que no actuó en defensa propia, y tampoco muestran ningún objeto en las manos de la persona fallecida cuando trataba de escapar, y sí muestran al policía dejando caer ese arma al suelo, una vez la víctima yace inerte.
Por el momento, los familiares de Scott no quieren atribuir el hecho a un nuevo episodio de violencia racial.
Recordemos que en las últimas semanas se han registrado diversas denuncias apuntando a un uso de fuerza inapropiada de policías blancos contra ciudadanos negros, que en algunos casos han llevado a estos últimos a la muerte.