El Cuerpo Nacional de Policía y la Policía Local acudieron al hospital de Manacor donde se encontraba una menor gitana que aseguraba que la habían raptado y violado. Los agentes temían un estallido de violencia y enviaron a todas las patrullas disponibles.
Los hechos ocurrieron a las tres de la tarde del sábado, cuando la adolescente, de etnia gitana, se encontraba con su novio, payo, en Manacor. Según su relato, de repente apareció un coche con varios ocupantes que la obligaron a subir a la fuerza y la drogaron con un pañuelo con cloroformo. El chico no pudo hacer nada.
Siempre según la denunciante, los desconocidos la trasladaron a un paraje de Felanitx, donde procedieron a violarla. Después la dejaron allí tirada y se marcharon. La menor, horas después, pidió ayuda y fue evacuada hasta el hospital de Manacor, donde fue sometida a una revisión ginecológica.
Sus familiares y allegados acudieron a Urgencias del hospital, y el Cuerpo Nacional de Policía y la Policía Local enviaron a cuatro dotaciones para controlar la situación, ya que había mucha indignación y se temía la reacción del clan. Las pruebas de droga dieron negativo (no había inhalado cloroformo) y los médicos no le hallaron lesiones en sus partes íntimas, por lo que la policía duda del relato.