El grupo de narcos de nacionalidad británica desarticulado por la Guardia Civil en Magaluf se abastecía en su país de los estupefacientes que vendía después 'al detall' en Punta Ballena. En continuados viajes a Inglaterra dejaban el dinero que obtenían, y traían remesas de cocaína, cristal y éxtasis. En esta operación, la Guardia Civil ha trabajado junto a la Agencia Nacional del Crimen británica.
Las investigaciones se iniciaron en el mes de junio gracias a un chivatazo de otros británicos detenidos por el mismo motivo. A partir de ahí se acotó la actuación del grupo de sospechosos: todos ellos residían en zonas alejadas de Punta Ballena.
Algunos de los nueve detenidos cuentan con antecedentes penales. En los ocho registros efectuados se incautaron de varias papelinas preparadas para el venta y 24.000 euros.
Los narcos utilizaban ‘pisos guardería' para almacenar la droga, es decir, viviendas cercanas a los puntos de venta donde se aprovisionaban cada noche. En los ocho registros realizados se incautaron dosis preparadas para la venta y 24.000 euros en efectivo. En el operativo intervinieron sesenta agentes de la Guardia Civil.