Un agente de la Policía Local tuvo que lanzarse al mar en la Platja de Palma para rescatar a una masajista china que poco antes había huido de un control. La mujer, de 45 años, acabó detenida por una falta de desobediencia a los agentes de la autoridad.
El incidente tuvo lugar el jueves por la mañana. Una docena de agentes realizaban un control para identificar a las mujeres orientales que ofrecen masajes en la playa de forma ilegal, en virtud de la aplicación de la ordenanza cívica.
Una mujer china que se dedica a esta actividad empezó a correr por la orilla para evitar ser identificada. La masajista fue en dirección al Club Náutico de Can Pastilla.
Torrente
El jueves había bastante oleaje en la Platja de Palma. Cuando la mujer quiso atravesar caminando la zona del torrente de Sant Jordi, junto al puesto de socorro de la Cruz Roja, se adentró en el agua sin querer. Como no sabía nadar empezó a pedir ayuda.
Pedro Adrover, uno de los agentes que participaba en el dispositivo, había ido tras la mujer cuando se dio a la fuga. Al verla pedir auxilio en el mar se quitó la ropa y se lanzó a por ella. Poco después logró sacarla del agua. Adrover recordó ayer: «No sabía nadar y pedía ayuda porque se había ido hacia adentro por el oleaje, llegué hasta ella, estaba exhausta y muy nerviosa. Yo he realizado dos cursos de chino en la Escuela Oficial de Idiomas y le hablé un poco para tratar de calmarla, después pude llevarla hasta la orilla y todo salió bien». «Se da la casualidad de que el jueves era su cumpleaños y mira cómo lo celebró», agregó.
La mujer rescatada después explicó a la intérprete que estaba muy agradecida al policía por haberla salvado, pero se negó a facilitar su documentación y a colaborar, por lo que quedó detenida.