Había unas 300 personas pero a las doce del mediodía no se oía ni una alma en la plaza Major de sa Pobla. Los vecinos y los miembros del Consistorio celebraron ayer en las puertas del ayuntamiento un minuto de silencio en memoria de la copiloto fallecida en el vuelo de Mali, Isabel Gost, y el resto de personas que viajaban a bordo del avión.
El alcalde, Biel Serra, excusó la ausencia de la familia más próxima de Isabel Gost y explicó que «han pasado dos días muy duros y ahora quieren un poco de tranquilidad». Además, Serra añadió que los familiares están a la espera de saber como avanza la investigación de accidente del avión para saber cuándo se llevará a cabo la repatriación del cuerpo de Isabel Gost.
La que sí asistió al minuto de silencio fue la tía Joana de Isabel. Muy emocionada y triste, Joana dijo que «es muy duro tener que decir adiós a un hijo».
Los vecinos de sa Pobla participaron en el minuto de silencio de ayer con lágrimas en los ojos y rostros tristes. Muchos coincidían en decir que «Isabel se ha marchado haciendo lo que más le gustaba que era volar y estar cerca del cielo».