Confesión con lagunas. Nicasio García, el hombre que mató a puñaladas a su expareja, Isabel Barceló, en Felanitx el pasado miércoles, ingresó ayer en prisión tras declarar ante el juez. En su versión judicial negó que tuviera una intención previa de matar a Isabel aunque a la vez sí admitió que llevaba un cuchillo de gran tamaño escondido cuando se encontró con ella. «Por intuición» y «por casualidad» justificó que llevara el arma blanca encima.
La pareja se había separado hacía unos pocos días. Esa mañana quedaron para que ella le llevara una bolsa con pertenencias suyas a su casa, en el número 56 de la calle Cala Figuera. Según el detenido bajó y la persuadió con una excusa para que subiera a su casa porque tenía la intención de hablar para que ella volviera con él. De hecho, en varios momentos de su declaración insistió en que está enamorado de la víctima. De acuerdo con su versión, cuando subieron a la vivienda intentó darle un abrazo. Isabel lo rechazó y entonces comenzó una disputa entre ambos. Nicasio dice que fue entonces cuando primero le dio dos puñetazos. Los dos golpes tiraron al suelo a la mujer y entonces, el agresor se abalanzó sobre ella y le dio una primera puñalada. Después, señala que se fue a la cocina, cogió otro cuchillo y volvió al pasillo en el que estaba la víctima para asestarle un segundo golpe. La autopsia apunta a que, en contra de la versión de él, fueron más las heridas que provocó a la víctima. En todo caso, lo que digan los forenses será importante a la hora de establecer si la primera herida fue ya mortal o si, el segundo ataque sirvió para rematarla. Lo que Nicasio García admite es que, en ese segundo ataque su víctima ya estaba inconsciente
Poco después del ataque llegó a la vivienda el hijo de él que se encontró con el cuerpo de la víctima en el suelo y a su padre aún dentro del domicilio. Fue él quien dio la alarma por lo ocurrido. En su versión judicial, Nicasio García aludió también en varios momentos a que tenía lagunas en lo que ocurrió esa mañana y en que actuó de forma casi inconsciente. De hecho, insistió en manifestar su arrepentimiento por lo ocurrido y en pedir perdón a la familia de la fallecida que está personada en la causa. La versión que dio al juzgado es similar a la confesión que ya realizó ante la policía judicial de la Guardia Civil de Manacor.
Nicasio García está imputado por el momento de un delito de homicidio, si bien las acusaciones -la familia de la víctima está representada por el letrado Jaime Campaner- plantean los hechos como un asesinato.