«Quiero ser contundente con lo que ha pasado porque son hechos muy graves: que dos policías locales de servicio se líen a golpes es un hecho lamentable». Joan Jaume, el alcalde de Llucmajor, condenó ayer los hechos desvelados en primicia por Ultima Hora y anunció que desde el primer momento en el que tuvo conocimiento de lo que había pasado ordenó una investigación urgente.
Tal y como informó ayer este diario, en la medianoche del pasado día 15 un policía local con su coche patrulla cerró a otra dotación en la Ronda Migjorn, a la entrada del pueblo. Acto seguido, se apeó del vehículo y sacó al ocupante del otro por las fuerza.
A golpes
Los dos policías, entonces, se enzarzaron en una violenta pelea, con golpes, patadas y puñetazos. Ambos acabaron con las camisas del uniforme rotas y finalmente fueron separados por un tercer funcionario. Todo ello ocurrió ante la mirada atónita de los numerosos clientes de un bar colindante, que no daban crédito a lo que veían.
Ayer, en declaraciones a este rotativo, Joan Jaume reconoció que el pueblo estaba «escandalizado» por lo que había ocurrido y prometió llegar «hasta el final». «Lo que publicáis hoy es correcto en su totalidad, sólo puedo añadir que desde el Ayuntamiento lamentamos muchísimo lo ocurrido y que hemos tomado todas las medidas para que no vuelva a ocurrir. Se ha abierto un expediente sancionador y ahora hay que dejar que los mandos trabajen», añadió el primer edil de Llucmajor.
Joan Jaume explicó que, además de la investigación interna y municipal, los juzgados de Palma podrían abrir diligencias «ya que el expediente es muy posible que se entregue allí». Al tratarse de un delito de lesiones, la autoridad judicial podría intervenir. De momento, uno de los agentes implicados está de baja por los golpes recibidos.
«Son funcionarios públicos, en hora de trabajo, con el uniforme; en fin, es un hecho muy lamentable, pero también muy puntual. Lo ocurrido es una excepción en una plantilla que trabaja bien», continuó.
Reacciones
Por su parte, los sindicatos de la Policía Local UGT, SPPME y CSIF manifestaron ayer que «los hechos son lamentables y dañan la imagen del Cuerpo. Condenamos categóricamente lo que ha pasado, pero queremos dejar constancia de que es un incidente puntual, dentro de un Cuerpo ejemplar». Los sindicatos concluyeron que «esperamos que se tomen la medidas oportunas».