El presunto autor de la agresión racista ocurrida en el metro de Barcelona el pasado sábado es un joven menor de edad, y los Mossos d'Esquadra han imputado a otras dos personas como coautores de los hechos.
La policía autonómica ha informado este lunes de que al supuesto autor de la agresión a puñetazos a un joven asiático, de 25 años, originario de Mongolia y vecino de Santa Coloma de Gramenet (Barcelona), se le imputa una falta de lesiones y un delito de odio y discriminación, según ha explicado en rueda de prensa el jefe de la División de Transporte de los Mossos d'Esquadra, el intendente Joaquim Bayarri.
Otras dos personas, una de las cuales también es un menor, están imputadas en relación con estos hechos como coautores de la agresión y han sido citadas a declarar.
El mayor de edad es de nacionalidad española y residente en el área metropolitana de Barcelona, según ha revelado el intendente.
El supuesto autor de la agresión, que ha sido detenido este lunes, ha sido puesto a disposición de la Fiscalía de Menores tras declarar ante los Mossos d'Esquadra.
La policía autonómica ha identificado a los tres imputados tras ver las imágenes de la agresión en un vídeo que filmaron con un teléfono móvil y que colgaron en Youtube y las que les ha facilitado Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB) de las cámaras de seguridad.
«Nos interesa establecer todo lo ocurrido. No es lo mismo lo que se ve en el vídeo que todo lo que pasa», ha explicado Bayarri, que ha pedido a las personas que estaban en el vagón cuando ocurrieron los hechos, y que aún no lo han hecho, que se pongan en contacto con los Mossos.
El vídeo colgado en la red no recoge lo que ocurrió desde que el agredido y los agresores entraron en el convoy en la estación de Universitat de la L1.
Las investigaciones policiales a partir de la denuncia de la víctima, los testimonios de pasajeros y otras imágenes han constatado que la agresión se llevó a cabo hacia las 22.00 horas, entre las estaciones de Sagrera y Fabra i Puig, que los agresores salieron del metro en esta última y que el joven mongol volvió a subir al mismo vagón.
Bayarri ha explicado que el joven pidió ayuda a los servicios de seguridad del metro en la estación de Santa Coloma y fue atendido por el SEM (Sistema de Emergencias Médias) que lo trasladó al Hospital del Esperit Sant de esta localidad, donde le atendieron por contusiones en la cara y parte del cuerpo.
También ha explicado que la policía tuvo noticia de la agresión ayer por la mañana a partir de que se colgó el vídeo en internet y aparecieron informaciones en la red, por lo que comenzaron las pesquisas para identificar y localizar a la víctima, al autor de la agresión y a sus colaboradores.
La víctima denunció la agresión horas mas tarde en la comisaria de los mossos de Santa Coloma de Gramenet y prestó declaración.