La Guardia Civil prosigue con la búsqueda, sin descartar ninguna hipótesis, de la joven de 15 años Malén Ortiz seis meses después de su desaparición tras ser vista por última vez en la rotonda de los piratas de Magaluf cuando iba a comer a la casa de su novio a Son Ferrer, tras salir del instituto de Santa Ponça.
La última imagen que se tiene de la menor fue capturada a las 15.45 horas del 2 de diciembre del año pasado por la cámara de seguridad de una gasolinera de esta zona cuando se dirigía con su patinete verde a la casa de su novio.
Poco antes habló con la secretaria de su padre para avisar de que comería con su novio, quien aseguró en su día a los investigadores que Malén nunca llegó a su casa.
Seis meses después de aquel día, el padre y la madre, que viven separados, han convocado sendas concentraciones para este domingo y mañana para mantener vivo el recuerdo de su hija y que las fuerzas de seguridad prosigan con la búsqueda de la menor.
El padre de Malén, Alejandro Ortiz, ha organizado una concentración este domingo a las 11.00 horas en la rotonda de los piratas y a través de la página web «www.malenzoeortiz.com» solicita el apoyo de los vecinos para obtener alguna pista sobre su hija.
El padre ofrece una gratificación de 80.000 euros, reunida por familiares y amigos, a quien facilite información que conduzca al paradero de la menor.
La madre, Natalia Rodríguez, ha convocado una concentración para mañana en el pinar de Santa Ponça, a las 19.00 horas, en recuerdo de su hija. «Mi corazón de madre me dice que es el momento de hacer algo para que no caiga en el olvido», ha declarado la madre a Efe.
Hace unas semanas, la delegada del Gobierno en Baleares, Teresa Palmer, aseguró que la desaparición de esta adolescente es el asunto que más le preocupa, al tiempo que defendió la investigación del caso por parte de la Guardia Civil, que debe ser silenciosa «para ser efectiva».
Palmer afirmó que desde el principio la Guardia Civil no ha dejado de indagar para intentar averiguar el paradero de la menor.
«Es el tema que más preocupa a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en Baleares y el que más me preocupa a mí como delegada, aunque no hablemos de ello cada día porque no podemos ni debemos hacerlo», declaró Palmer.
A lo largo de estos meses «nunca se ha dejado de investigar este caso y nunca se ha descartado ninguna hipótesis», subrayó la delegada del Gobierno.
Efectivos de la Guardia Civil y voluntarios han buscado reiteradamente sin éxito pistas en la zona donde se vio por última vez a Malén, caso de una vieja casa de Sa Porrassa.
En estas tareas de búsqueda han participado policías, bomberos, unidades caninas, agentes del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil, Protección Civil y cientos de voluntarios.
En marzo pasado, los agentes, con la ayuda de perros, realizaron varios registros en domicilios del municipio de Palma a raíz de movimientos detectados en las redes sociales relacionados con Malén.