Una violación consumada y un ataque sexual perpetrados a dos chicas de 24 y 30 años, respectivamente, en menos de 48 horas, han hecho saltar todas las alarmas en Inca. Los vecinos se muestran muy preocupados, pero a la vez indignados porque uno de los ataques se produjo en el interior de un túnel peatonal que separa la barriada de Crist Rei con el resto de la ciudad.
Dicha pasarela dispone de cámaras de seguridad pero, desde que se cerró el párking de la plaza Batle Antoni Mateu Ferrer, conocido popularmente como el Campet des Tren, el sistema de vigilancia está totalmente inutilizado y no hay grabaciones.
A las 10 de la mañana, a plena luz del día, un varón abordó en el citado túnel a una mujer de 30 años de edad y nacionalidad española. El presunto agresor se lanzó sobre ella, le rompió la ropa y forcejearon. Fruto de la lucha la mujer perdió parte de su vestimenta superior quedando semidesnuda. Finalmente, la víctima consiguió zafarse del ataque, salir y pedir ayuda.
No tuvo tanta suerte una joven de 24 años de edad que, en la madrugada del jueves al viernes caminaba por la plaza Llibertat, de Inca. Un violador la siguió sigilosamente, se abalanzó sobre ella y la introdujo a la fuerza en el interior de un portal. Una vez allí, le arrebató la ropa con extrema violencia y consumó la agresión sexual.
Ambas mujeres acudieron a un centro médico donde fueron exploradas y se remitió el correspondiente informe facultativo para aportarlo en la denuncia. La Guardia Civil de la compañía de Inca inició las primeras diligencias, pero acto seguido los dos casos fueron traspasados al EMUME (Equipo de la Mujer y Menor) quienes se han hecho cargo de la investigación.
Por el momento, se sospecha que ambos agresores son personas diferentes, según el testimonio de las implicadas, pero no se descarta ninguna hipótesis.