La Audiencia Provincial ha ratificado la condena de dos años y tres meses de prisión a un ladrón especializado en reventar máquinas tragaperras en bares de Palma. El acusado cometió tres asaltos en establecimientos de la zona del Rafal en los que entre daños y botín costó a los propietarios de los locales más de 5.400 euros. El primero de los locales fue asaltado el 17 de junio de 2012. El acusado, un ciudadano español con antecedentes penales entró en el local y abrió varias máquinas tragaperras. Sin embargo no consiguió hacerse con botín alguno porque empezó a sonar la alarma del establecimiento y tuvo que poner pies en polvorosa.
Un mes después, el 25 de julio, sobre las doce de la noche entró en otro local del Rafal. Esta vez sí consiguió llevarse 1.500 euros en monedas de las máquinas tragaperras y de la de tabaco. Además se llevó cajetillas valoradas en 150 euros.
Ventana
El tercer asalto lo perpetró en un bar de la calle Reina Violante. Entró por una ventana sobre las dos y medias de la mañana y también consiguió llevarse el efectivo que había en las máquinas tragaperras.
A partir de estos tres robos, la policía inició una investigación, en la que se basaba en la forma de actuar del acusado, quien admitió en el juicio uno de los asaltos y fue condenado por los otros dos.