Un hombre de 36 años reconoció ayer que violó a punta de cuchillo a una mujer que esperaba el autobús en la calle Joan Maragall, de Palma. El acusado se conformó con una condena de ocho años de prisión por una agresión sexual cometida el día de Nochebuena de 2012 sobre las 5.45 horas. Además cerró el juicio con un protocolario «estoy arrepentido y me gustaría pedir perdón a la víctima».
El acusado abordó por detrás a la víctima y le puso un cuchillo de 15 centímetros de hoja en el cuello. La condujo a un parque cercano y le dijo: «Llevo siguiéndote varios días, cállate que si no, te vas a enterar». La víctima, aterrorizada quedó a su merced. El acusado la forzó mientras la amenazaba con matarla si gritaba de forma reiterada. La secuencia se prolongó hasta que el agresor escuchó ruidos de autobuses y de gente que se aproximaba al lugar. Antes de irse, quitó el móvil a la víctima y la amenazó con que estaría vigilándola. También le dijo a la mujer que si no estaba en la misma parada cada día para que pudiera hacerle lo mismo, se lo haría a sus hijos. El acusado fue detenido minutos después por la policía en la zona cercana al asalto.
La Fiscalía reclamaba inicialmente una condena de catorce años de prisión al acusado. Sin embargo, antes del juicio éste indemnizó a la víctima con el doble de la cantidad que se le reclamaba, por lo que se le rebajó la pena al admitirse una atenuante de reparación del daño.