Francisca Vidal, presidenta del tribunal de la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Palma catalogó la conformidad de: «extremadamente benevolente».
Se trata de un hombre de 34 años que admitió que violó a su hijastra y a una amiga de la menor y que abusó sexualmente de otra chica y de un hijastro de nueve años, con lo que asume una condena de 12 años de prisión y evita el riesgo de ser sentenciado a 37 años, como solicitaba inicialmente el fiscal del caso.
Agustín C. R., de 34 años de edad y nacionalidad ecuatoriana, reconoció que a partir de 2010, cuando la hija de su esposa tenía 13 años, y hasta 2012, la forzó en numerosas ocasiones a mantener relaciones sexuales completas cuando se encontraban a solas en el domicilio familiar. Para evitar que contara nada, la amenazó con causarle daño a ella o a su madre y su hermano.
También en 2010 violó a una amiga de su hijastra, igualmente de 13 años, a la que llevó a un dormitorio de la vivienda con la excusa de mostrarle un vídeo, la magreó, la desnudó y abusó de ella, quien no pudo evitarlo por el miedo y porque era consciente de que nadie podía ayudarla. A esta menor la obligó posteriormente a mantener relaciones sexuales con él en distintos lugares, como los baños de unos conocidos almacenes comerciales de Palma. En 2009, ya se metió en la cama del hijo menor de su mujer, que tenía nueve años, y le había realizado tocamientos en la zona genital.
La cuarta de sus víctimas fue otra amiga de su hijastra a la que que en 2010, cuando la chica tenía 14 años, llevó a una habitación del domicilio familiar, la desvistió parcialmente y le manoseó los pechos, aunque la menor se zafó y huyó de la casa.