El juez de guardia ordenó ayer por la tarde el ingreso en prisión de David C. C., el vecino de Palma de 49 años que intentó matar a sus dos hijos intoxicándolos con lejía mezclada con salfumán. El acusado permanece ingresado en el hospital de Son Espases, y en cuanto se recupere por completo deberá entrar en la cárcel.
En la noche del jueves al viernes, David C. se las ingenió para dormir en el mismo cuarto que sus hijos. La familia residía en un segundo piso de la calle Dragonera, muy cerca del cuartel de la Policía Local de Palma. El matrimonio se estaba separando y esa noche David se trasladó al cuarto de sus hijos.
Planeado
El Grupo de Homicidios del Cuerpo Nacional de Policía, que investiga lo ocurrido, cree que el cabeza de familia tenía planificado lo que iba a hacer, y esperó a que su hija de 21 años y su hijo de seis se durmieran. Entonces, sin que su mujer lo escuchara desde el otro cuarto, salió de la habitación, cogió un barreño y mezcló en su interior una gran cantidad de lejía con salfumán. Entró el cubo en la estancia y cerró la puerta, esperando que los gases tóxicos mataran a los tres.
Sin embargo, no contó con que su hijo comenzara a toser, lo que alertó a la progenitora. A las cinco de la madrugada, cuando David y sus hijos llevaban horas intoxicándose poco a poco, la madre entró en el cuarto y descubrió el dantesco panorama. Un vecino también se había despertado por la tos del niño. La mujer le pidió ayuda y después llamó a la policía. David C. C. fue detenido e ingresó en Son Espases. El niño y la chica también fueron atendidos en el centro hospitalario, pero después recibieron el alta médica.
El hombre, tras recuperarse, se puso muy violento con los médicos, y no fue hasta ayer por la tarde cuando la comisión judicial decidió interrogarlo. Según parece, no soportaba la idea de que iba a perder a su mujer. El juez ordenó su ingreso en prisión.