La Policía Local de Palma intervino el jueves por la noche y en la madrugada de ayer en dos accidentes con conductores ebrios implicados. En los dos casos no hubo heridos pero sí daños materiales cuantiosos.
El primer siniestro ocurrió alrededor de las 22.30 horas del jueves frente al Hipódromo de Son Pardo. Según testigos, un joven estaba haciendo 'trompos' con su coche, impactó contra un vehículo aparcado y se dio a la fuga. En ese momento se estrelló contra una farola.
Los agentes se desplazaron al lugar y le practicaron la prueba de alcoholemia. Superó cuatro veces la tasa permitida y fue trasladado al cuartel de Sant Ferran en calidad de detenido.
A las cuatro de la madrugada de ayer se registró el segundo siniestro en Palma. Un conductor perdió el control, se subió a la mediana de la autovía frente a la catedral, y derribó un semáforo. Una dotación de la Policía Local se desplazó hasta el lugar. Los agentes señalizaron la zona hasta que el vehículo fue retirado para evitar otros siniestros. El conductor explicó que se había dormido y por eso se subió a la mediana y derribó el semáforo. En la prueba de alcoholemia también dio positivo.