Un herido grave y dos leves es el resultado de un accidente de tráfico que tuvo lugar en la madrugada de ayer frente al cementerio de Palma.
Tres jóvenes que según ellos mismos declararon venían de «tomar unas copas» circulaban en un Mini de color rojo y sobre la 1.00 horas bajaron por el Camí de Jesús, en dirección a la rotonda del cementerio. El conductor circulaba a una velocidad muy elevada y de repente el coche se le fue, patinó unos quince metros, se subió a la acera y finalmente se estrelló contra una farola. El piloto sufrió fractura de mandíbula y sus dos amigos contusiones.
El Mini quedó destrozado. Policías Local, bomberos y ambulancias acudieron hasta ese tramo del camino, y atendieron a los tres muchachos.