El delegado de Baleares de la Unión de Oficiales de la Guardia Civil, Elisardo Barrueco, ha informado que «el 90% de los detenidos por tráfico de drogas y robos con violencia» son cometidos por individuos de procedencia subsahariana por lo que la instrucción del Puesto Principal de Palma Nova sobre informar a los familiares de personas negras «en el momento idóneo para la investigación» obedece «única y exclusivamente a criterios operativos y de planificación del trabajo».
En un comunicado, ha manifestado «de forma contundente la total repulsa» del Cuerpo «a cualquier conducta racista» y ha explicado que «hay que tener en cuenta» que es «una realidad incuestionable» que la mayoría de delitos de este tipo que tienen lugar en Calvià los cometen personas de esa procedencia.
Debido a esto, han explicado que «en este tipo de delitos, si se lleva a cabo de forma desorganizada el derecho de aviso a familiar que tiene todo detenido, la posterior investigación no vale para nada».
Según han indicado, «en la instrucción no se ordena que no se llame a los familiares, sino que se haga en el momento mas idóneo para la investigación y esto los guardias civiles a los que va dirigida la orden lo saben perfectamente».
Así, ha manifestado que aunque en «un principio a los ciudadanos les puede parecer extraño», «son razones de servicio las que obligan a modular esta forma de proceder y siempre se hace respetando la ley».
Además, han reprochado que «la denuncia y filtración de la instrucción obedece sin duda, al hábito de atacar sistemáticamente a los mandos por quienes tienen algún tipo de resentimiento y ni por asomo se aproxima a la realidad de los hechos».
En este sentido, han aprovechado para «defender la profesionalidad de la oficial que manda la Unidad, que bastante tiene con llevar uno de los Puestos mas conflictivos de toda España».