El juez de guardia ordenó ayer el ingreso en prisión de Ahmed Ezzoubaa, el marroquí de 31 años detenido por intentar degollar a su expareja el pasado domingo por la mañana en Palma. La víctima, Virginia Banzalez López, de 29 años, continúa ingresada en el hospital de Son Espases, aunque se encuentra fuera de peligro.
Ahmed fue trasladado ayer por la tarde a los juzgados de Vía Alemania por parte del Cuerpo Nacional de Policía y está acusado de un delito de asesinato en grado de tentativa. Ahmed y Virginia habían mantenido una relación sentimental y él no aceptaba que ella no quisiera volver a estar con él.
El domingo por la mañana quedaron en la calle Lluís Martí para que Virginia le devolviera un televisor y un microondas. La joven acudió en coche en compañía de su madre. Mientras Ahmed descargaba el televisor y el microondas se inició una discusión. El marroquí intentó degollar a su excompañera, quien estaba en el interior del coche. El agresor huyó aunque poco después fue detenido.
Asistencia
La madre de Virginia pidió ayuda. Una operadora del 061 que estaba en casa de su madre bajó a la calle al escuchar los gritos de auxilio, e hizo compresión sobre la herida en el cuello con toallas para parar la hemorragia, ayudada por otra vecina. La víctima se encontraba inconsciente en el coche y perdía sangre de forma abundante.
Instantes después llegó una dotación del Cuerpo Nacional de Policía. Los dos agentes también prestaron asistencia a la herida hasta que se personaron las ambulancias en la calle Lluís Martí. El CNP se hizo cargo de la investigación y el sospechoso fue localizado y detenido en las inmediaciones.
Una UVI móvil de la Clínica Juaneda estaba casualmente en la calle Manacor, por lo que en muy poco tiempo llegó al lugar. La ayuda prestada por las dos jóvenes, los agentes y la rápida intervención de los sanitarios y el médico fue vital para Virginia Banzalez.
El equipo de la ambulancia logró estabilizarla y después fue evacuada a Son Espases en estado muy grave. En el hospital palmesano fue operada de urgencia aunque 24 horas después había experimentado una mejoría. Ayer había sido destubada y ya podía articular algunas palabras.
Mientras tanto su excompañero ingresó en la cárcel de Palma por intentar matarla.