El Ibanat dio por controlado ayer tarde, a las 18.00 horas, el fuego que se inició en las cercanías de Cala Torta y ha quemado 480 hectáreas de zona montañosa de Artà y Capdepera. La mitad de la superficie afectada, concretamente 227 hectáreas, pertenecen a la finca pública de sa Duaia, que tiene una extensión de 472 hectáreas. El paraje arrasado por las llamas estaba compuesto principalmente por carrizo y matorrales, y el fuego no ha afectado al espacio protegido por el Parc Natural de la Península del Llevant, según informaron desde el Govern.
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Todavía con la resaca del incendio de Andratx, que arrasó 2.335 hectáreas de masa forestal en este municipio, Estellencs y Calvià, el segundo gran incendio del verano se inició pasadas las 22.00 horas del martes en las inmediaciones de Cala Torta. El fuego cogió fuerza con rapidez y las llamaradas eran visibles desde Menorca, tal y como se apreciaba en las imágenes publicadas ayer por este periódico.
Durante la noche, unas 85 personas trabajaron en las labores de extinción y los esfuerzos se centraron en controlar el frente que avanzaba hacia Capdepera.
El fuego obligó a desalojar preventivamente a unas 180 personas, sin fuese necesaria atención sanitaria alguna. Estas personas pudieron regresar de nuevo ayer a sus casas.
Refuerzos
A primera hora de la mañana se incorporaron a las labores de extinción ocho medios aéreos del Ibanat, además de dos helicópteros de la Unidad Militar de Emergencias (UME) de Valencia con una veintena de personas cada uno, así como un hidroavión del Ministerio de Agricultura que se desplazó desde Zaragoza. A media mañana también se incorporó otro batallón de la UME desplazado desde Bétera, con unos 40 militares más.
Estos efectivos se unieron a las brigadas del Ibanat y de los Bombers de Mallorca, que combatían las llamas desde la noche anterior, apoyados por las policías locales de Artà y Capdepera, la Guardia Civil, Protección Civil y Dirección General de Emergencias, entre otros. Por la tarde, los medios aéreos se fueron retirando una vez que el fuego quedó controlado. Un retén de 25 personas continuó las labores de extinción durante la noche.