Javier Alarcón ha renunciado a la Dirección del Instituto de Medicina Legal (IML) de Balears, tras ocho meses en el cargo. Alarcón ya ha comunicado su decisión al director general de Relaciones con la Administración de Justicia, Ricardo Conde.
En noviembre del año pasado, el médico forense palmesano fue nombrado director de forma provisional, en medio de una fuerte crisis en ese órgano judicial. El pasado 25 de mayo, la dirección general ratificó a Alarcón en el cargo, aunque los acontecimientos se precipitaron la semana pasada, cuando Conde visitó Palma. El responsable de Justicia comparecía en la Isla para informar sobre la negativa de su Ministerio a desmantelar las sedes físicas en los partidos judiciales de Inca y de Manacor.
Fue entonces cuando Alarcón se entrevistó con Conde y le comunicó su decisión de dejar su cargo de director. Las razones que esgrimió para su renuncia fueron varias, entre ellas las quejas de algunos miembros del Instituto Forense en relación a su gestión, y más concretamente al reparto del trabajo y a la asignación de las guardias.
Tensión
Asimismo, el hasta ahora director no ha podido pacificar las malas relaciones existentes en el IML, que ya venían heredadas. Cuando el Ministerio de Justicia optó por Alarcón como nuevo director, uno de los objetivos de la nueva cúpula era calmar los ánimos internos, que estaban muy crispados. El ex director seguirá en la estructura del Instituto Forense, como jefe de clínica. De momento no ha trascendido el nombre de su sustituto. Algunas fuentes apuntan a que podría ser un médico forense llegado de fuera de Palma.