Pere Barceló Rigo, el expárroco de Can Picafort acusado de pederastia, dijo ayer que se encontraba «bien» y su expulsión de la Iglesia «era previsible». Barceló hizo estas breves declaraciones a IB3 Televisió fuera de cámara mientras araba con su tractor en su finca de s'Alqueria Blanca, en Santanyí. Barceló fue condenado el pasado jueves por el Tribunal Eclesiástico de Mallorca por gravísimos delitos cometidos contra menores en el pasado, y por ello expulsado del estado clerical, es decir, que tiene totalmente prohibido el ejercicio del sacerdocio.
Paralelamente al expediente tramitado por el Tribunal Eclesiástico de Mallorca, el caso también está en fase de instrucción en los juzgados de Inca y se están practicando diligencias y recabando testimonios.
Al respecto hay tres jóvenes que han ratificado ante el juzgado que fueron víctimas de abusos por parte de Pere Barceló Rigo cuando tenían diez, ocho y siete años de edad, hace ahora unos 15-20 años. Entre las tres víctimas no hay ningún vínculo familiar ni relación de mistad, según explicaron fuentes cercanas al caso.
Una de las tres denunciantes, que ahora tiene 24 años, asegura que fue víctima de abusos y violada varias veces entre los diez y once años, cuando Pere Barceló era párroco de Can Picafort. Las otras dos jóvenes relatan episodios de abusos en el período que Barceló ejerció el sacerdocio en la localidad de Cala Rajada.
Estas tres víctimas han presentado las correspondientes denuncias ante la Guardia Civil y los juzgados de Inca, lo que supuso la imputación de Pere Barceló Rigo. Éste defendió su inocencia cuando declaró ante el juez y aseguró que tenía esperanzas de que todo se aclarara.
Ahora, por un lado, el Tribunal Eclesiástico ha dictado sentencia y lo ha condenado con la expulsión del estado clerical, al considerarlo culpable de la comisión de delitos contra el sexto mandamiento del decálogo con menores. Por otro lado, la justicia ordinaria sigue su instrucción en los juzgados de Inca aunque se encuentra en una fase inicial.
A pesar de que el fallo de Tribunal Eclesiástico de Mallorca no es vinculante a efectos de la justicia ordinaria, supone un duro revés para Pere Barceló.
Al concluir la instrucción en los juzgados de Inca, el caso podría pasar a manos de la Audiencia de Palma debido a la gravedad de los delitos por lo que podría ser juzgado Pere Barceló.