Síguenos F Y T L I T R

Muere una pasajera de 83 años que viajaba en el autobús accidentado en Bunyola

El personal sanitario del 061, atendiendo a los heridos en el jardín de una vivienda. | Vasil Vasilev

| Bunyola |

A primera hora de ayer, una de las pasajeras que viajaban en el autobús de línea que sufrió un aparatoso accidente el domingo en Bunyola, falleció en el hospital. La mujer, natural de Sóller fue identificada como Florentina Busquets, de 83 años.


En un primer momento, según el parte médico facilitado, de los 16 pasajeros que iban en el vehículo, cuatro de ellos resultaron ilesos, once de carácter leve y tan sólo el conductor tenía un pronóstico grave. Al parecer, la mujer empeoró después y falleció en el hospital donde fue trasladada nada más producirse el suceso.

Conductor

Por otra parte, el conductor del autobús de línea, Pedro P.B., de 45 años, continuaba ayer ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del hospital de Son Espases en estado muy grave. El chófer sufrió un traumatismo craneal y fue el ocupante del vehículo que, en principio, padeció las lesiones más graves.

El accidente ocurrió alrededor de las 14.20 horas y el bus circulaba desde Sóller hacia Palma. El conductor sufrió un infarto, lo que motivó que perdiera el control del bus, que se salió de la vía por su derecha y se estrelló contra un muro de piedra. Al respecto, un familiar de Pedro explicó ayer que éste «había llamado a la empresa diciendo que no se encontraba bien, pero la contestación de la empresa no la sabemos y no podemos hablar hasta que se esclarezca todo, ya que el suceso no está nada claro». «Queremos que se ponga bien y salir de esta situación», agregó.


Este periódico intentó ayer contactar con la empresa por teléfono en varias ocasiones pero no obtuvo respuesta.
Tras el siniestro, varios vecinos, personas que estaban por la zona y otras que pasaban por el lugar se pararon a ayudar. Una de ellas fue Antonio Martínez, que estaba comiendo en casa de su hermana. Martínez presenció el accidente, ayudó a los heridos y trató de regular el tráfico hasta la llegada de las ambulancias y la Guardia Civil. Este hombre quiso denunciar ayer que «hubo pasajeros a los que no pudieron venir a buscar sus familias o amigos y la solución que les dieron fue que juntaran dinero entre unos cuantos para un taxi y esto me parece lamentable».

Lo más visto