Agentes del Cuerpo Nacional de Policía procedieron a la detención de un peligroso delincuente acusado de estrangular a sus víctimas hasta que perdían el conocimiento momentáneamente para robarles.
El arrestado responde a la identidad de Juan Sebastián R. P., de 42 años de edad y nacionalidad española.
Los hechos se remontan al pasado miércoles. Un varón que circulaba tranquilamente por la zona del mercado de Pere Garau detuvo su vehículo cuando el semáforo se puso en rojo. En ese instante, el acusado aprovechó, abrió la puerta del acompañante y, tras un pequeño forcejeo, consiguió huir llevándose una bandolera que la víctima tenía sobre el asiento.
Casualmente, a escasos metros del lugar, se encontraba una pareja de agentes de la Policía Nacional que rápidamente procedieron a su arresto.
Una vez que el sospechoso estaba en dependencias policiales el Grupo de Atracos del Cuerpo Nacional de Policía descubrió que se trataba de un peligroso y muy violento atracador que asaltaba a mujeres aplicándole técnicas de estrangulamiento.
En el primero de los casos se registró el pasado 12 de diciembre. En esa ocasión, una joven de 19 años de edad regresaba a su domicilio cuando, en las inmediaciones de la calle Lladoner, en la barriada del Rafal, el detenido la cogió del cuello, la estranguló por la espalda, la dejó inconsciente tendida en el suelo y se marchó del lugar llevándose la mochila de la chica.
El segundo de los casos, que fue captado por una cámara de seguridad, sucedió dos días más tarde en el interior de un establecimiento de ropa regentado por unos chinos de la calle Capitán Vila.
En esa ocasión, el sospechoso accedió al interior del local cubierto con una capucha y luciendo unas gafas de sol oscuras.
Cuando el reloj marcaba las 19.45 horas, el asaltante se colocó detrás de una mujer de nacionalidad marroquí y procedió a su estrangulación hasta que perdió el conocimiento, cayó al suelo y le robó el bolso.
El arrestado es un varón de 42 años que acababa de salir del Centro Penitenciario de Palma tras cumplir una condena de más de 10 años por diferentes hechos delictivos.
La cámara de seguridad resultó determinante para proceder a la detención del sospechoso.