El borrador de la nueva Ley de Coordinación que está elaborando el Govern balear y, en el que el punto más polémico es la reducción de nueve a seis meses el periodo de trabajo de los policías turísticos, está levantando ampollas.
La nueva ley pretende que los ayuntamientos contraten a los policías de refuerzo tres meses menos que en la presente temporada. Por su parte, la Policía Local de Palma será una de las más perjudicadas y su enfado es monumental. Fuentes próximas a la cúpula policial han confirmado que la seguridad de la Platja de Palma se vería seriamente afectada. La Policía Local contaría con 34 policías turísticos menos en plena temporada alta a los que habría que sumar otros tantos que también perderían por las suplencias de vacaciones y días libres, hasta llegar al medio centenar de agentes menos para vigilar la principal zona turística de Balears.
Los más de 300 policías turísticos de Balears están calentando motores y prometen que el conseller de Administraciones Públicas, Simón Gornés y el gerente de la EBAP, Sergi Torrandell tendrán un ‘otoño caliente' si se aprueba este borrador de la futura ley. De momento, se está estudiando la posibilidad de llevar al Govern a los tribunales y a los ayuntamientos por contratación ilegal.
Por otra parte, también crece la indignación contra la EBAP ante la posibilidad de que los cursos formativos sean de pago.