El juez del Juzgado de Instrucción 2 de Ciutadella, en funciones de guardia, decretó ayer prisión provisional sin fianza, solicitada por el Ministerio Fiscal, para Francisco Javier M. M., de 40 años de edad. El fiscal le imputa ocho incendios forestales en Mallorca y cuatro en Menorca. Por su parte, la Guardia Civil le imputa nueve en Mallorca y cuatro en Menorca.
El sospechoso fue trasladado de Maó a Ciutadella a las dos de la madrugada de ayer y, después de escuchar su declaración, sobre las cinco de la madrugada, el juez decretó su ingreso en prisión.
En Palma
A lo largo de toda la tarde del lunes, el hombre ya declaró ante la Guardia Civil, y en la que hizo ante el juez prácticamente repitió lo dicho horas antes. En un momento dado Francisco Javier, que tiene su residencia habitual en Palma, se ‘derrumbó' y entre sollozos y dijo que, desde pequeño, sufre una patología que le habían identificado como piromanía, e imploró que le ayudaran a curarse de lo que dice que es su enfermedad.
En la información de ayer en este periódico se dijo que el sospechoso era técnico forestal. Al respecto, el Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Forestales de las Illes Balears envió una nota a este periódico en la cual señala que el pirómano «no es técnico forestal, sino trabajador agrícola». Pero al final, se pudo confirmar que hace un mínimo de cinco años que trabajó en la Isla para la empresa Tragsa. En su contrato figuraba que era conductor de maquinaria pesada. Una maquinaria que se utilizaba para hacer cortafuegos, limpieza de bosques y en temas medioambientales.
Con respecto a los incendios en Mallorca, en su declaración, Francisco Javier mantiene que en algunos de ellos se desplazó a distintas localidades en autobús.
Por parte de la investigación, cuyo grueso ha sido llevada por el Seprona, este periódico ha podido saber que, cuando se le detuvo en Menorca ya se contaba con datos concretos sobre su identidad y la posibilidad de que fuera uno de los pirómanos que ha estado actuando este verano en Balears.
Dichos datos parten del protocolo con el que se venía trabajando en Mallorca, que consistía básicamente en dedicar a personal a anotar matrículas de vehículos y fijarse en personas que aparecían en las zonas donde se declaraban incendios forestales.
Y la presencia de Francisco Javier, así como la de su turismo, de color blanco, marca Ford Fiesta, fue detectada en al menos dos ocasiones en Mallorca, y una tercera en uno de los cuatro incendios forestales que provocó a principios del mes de septiembre en Menorca.
Relación
Como ya se informó en este periódico, el sospechoso viajaba con frecuencia a Menorca, donde mantiene una relación estable con una mujer, en una localidad del centro de la isla.
Efectivos del Servicio de Protección a la Naturaleza (Seprona) continúan investigando pese a la detención. Primero porque se tiene la idea de que hay más personas que han provocado otros fuegos intencionados y, sobre el ahora encarcelado, se trata de confirmar lo que ha confesado e investigar si habría actuado en más ocasiones.