Un joven irlandés de 20 años es el último turista herido al precipitarse desde el balcón de su apartamento en Mallorca. El varón cayó desde un noveno piso al saliente de un séptimo, sobre las 00.35 horas de ayer, en Santa Ponça, fue trasladado en ambulancia a Son Espases y su pronóstico era reservado. Agentes de la Policía Local de Calvià se desplazaron al lugar del suceso y realizaron diversas gestiones para esclarecer los hechos.
El turista había llegado desde su país a Mallorca hacía unas horas, en compañía de una prima, para pasar unos días de vacaciones. Ambos se alojaban en unos apartamentos de la calle Ramon de Moncada, en Santa Ponça. Por la noche, el joven y su prima salieron ‘de marcha'. El chico regresó antes a los apartamentos y, según algunos testigos, «iba bastante bebido».
Balcón
Por causas desconocidas, sobre las 00.35 horas salió al balcón de su habitación del noveno piso, se agarró de la barandilla y se quedó colgando por la fachada. Sin embargo, las fuerzas le fallaron, se le soltaron las manos y cayó. Un pequeño toldo del octavo piso amortiguó la caída y el joven irlandés tuvo la suerte de pararse en un saliente que hay en el séptimo piso. En caso de haber rodado un metro más habría caído al vacío. El encargado de seguridad del establecimiento dio la voz de alarma y en breve se personaron en el lugar efectivos de la Policía Local de Calvià y una ambulancia del 061. El joven fue rescatado y evacuado a Son Espases.
Los policías realizaron gestiones para averiguar lo ocurrido. Tuvieron constancia de que el joven irlandés había llegado a Mallorca hacía unas horas y se había caído del balcón tras salir ‘de marcha' junto a su prima. La joven regresó a los apartamentos más tarde que el herido y cuando llegó se encontró con la mala noticia de que su primo estaba en el hospital.