Los Bombers de Mallorca no pueden utilizar nueve camiones nuevos que están en distintos parques que tienen en la Isla porque todavía no han sido matriculados. Se trata de cinco autoescalas automáticas y cuatro bombas urbanas ligeras (BUL), que deben resolver en gran parte la carencia de medios que tiene el Cuerpo.
Los camiones estuvieron tres meses en el parking de un concesionario de Santa Maria, pendientes de que el Consell tuviera dinero para pagarlos. Los responsables políticos de la institución solventaron este problema, en parte, y hace aproximadamente un mes las bombas urbanas ligeras fueron trasladadas del concesionario hasta los distintos parques, y quince días después se desplazaron los camiones autoescala.
Distribución
Los camiones autoescala y las bombas urbanas ligeras han sido destinados a los parques más grandes, concretamente Llucmajor, Inca, Alcúdia, Manacor y Calvià. Vehículos que están en buen estado de estos parques se seguirán usando en otros más pequeños como son los de Sóller, Felanitx y Artà.
Los nueve vehículos nuevos fueron trasladados del concesionario a los parques con matrícula provisional, por parte de personal del concesionario. Los bomberos empezaron a realizar prácticas con los nuevos vehículos y todo su material, ya que los camiones están perfectamente equipados, y creían que los podrían utilizar inmediatamente. Sin embargo, pasa el tiempo y los vehículos siguen sin matricular, por lo que no pueden salir a la calle a prestar servicio.
En el incendio del viernes noche en el polígono de Inca los Bomberos del Consell que están en el parque de esta localidad tuvieron que utilizar los camiones y la autoescalera vieja, que tiene 25 años de antigüedad, mientras que la bomba urbana ligera nueva y la autoescalera siguen en el parque a la espera de la matrícula.
El jueves, en el incendio forestal en Peguera, que provocó el desalojo de dos hoteles, los bomberos no tuvieron que usar la bomba urbana ligera, pero en caso de haber sido necesaria tampoco se habría podido sacar del parque.
Así que los nuevos vehículos están en los parques pero no pueden ser usados y, por tanto, es como si no estuviesen.