Oceana ha alertado sobre el «grave riesgo» que corre el Parque Nacional Archipiélago Toscano (Italia) tras los derrames de combustible, aceites y aguas residuales producidos por el crucero naufragado Costa Concordia. Así ha afirmado que dichos derrames podrían afectar al área protegida, que supone el mayor parque marino de Italia con presencia de cetáceos, corales y praderas submarinas.
La organización ha explicado que en los fondos rocosos de la isla de Giglio se asientan numerosas especies, como corales, moluscos y gorgonias, y en la parte occidental se extienden praderas submarinas de Posidonia oceánica, una especie endémica del Mediterráneo .
De este modo, el director de Investigación de Oceana Europa, Ricardo Aguilar, ha destacado que «el naufragio se ha producido cerca de un área protegida en la que habitan especies amenazadas, por lo que un posible derrame podría causar graves daños a organismos como cetáceos, tiburones y corales».
«Esta catástrofe demuestra que es necesario aumentar las medidas de seguridad de los cruceros», ha afirmado Aguilar.
El Parque Nacional, que engloba parte de las aguas de la isla de Giglio, está considerado una de las joyas ecológicas de Italia y un fuerte foco de atracción del turismo de buceo por su población estable de delfines mulares y otros cetáceos, como delfines listados, cachalotes, calderones grises y comunes e incluso rorcuales. Existen también especies menos conocidas como la esponja Aplysinia cavernícola, protegida por el Convenio de Barcelona.