«Cuando venga la policía pondré cara de bueno y cuando se marchen la liaré de nuevo. No tengo nada que perder. No tengo familia fuera y me da igual comerme cuatro años de cárcel por matarte». Así de amenazante, temerario y calculador se mostraba un chico de 15 años de edad que, tras ser localizado por agentes del Cuerpo Nacional de Policía por la calle tras haberse fugado del piso tutelado donde está ingresado provocó graves incidentes y trató de encabezar un motín en su interior.
Fugado
Los hechos se remontan al pasado día 6 de diciembre, concretamente sobre las 8.50 horas de la mañana. El menor interno se había fugado del centro y cuando la policía lo localizó lo entregó de nuevo a los educadores.
Durante toda la mañana, en el piso tutelado se vivieron escenas de gran nerviosismo y tensión. El menor, un chico que no tiene familia en la Isla, según información policial, generó un clima de crispación constante. Molestaba al resto de compañeros, les provocaba, ocasionó destrozos en el mobiliario del centro, lanzó piedras contra el vigilante de seguridad y los educadores. No contento con los incidentes mencionados, el interno trató de convencer al resto de compañeros y de esta manera encabezar un motín contra el personal docente. Además, en un momento dado, el chico cogió un trozo de cristal roto y se abalanzó contra el vigilante de seguridad amenazándolo mientras le decía: «No tengo familia fuera y me da igual comerme cuatro años de cárcel por matarte». Los responsables del piso tutelado, al ver que la situación se les escapaba de las manos decidió dar aviso a la Policía Local.