Durante más de cuatro horas la Policía Judicial de la Guardia Civil peinó ayer el Port d'Andratx en busca del arma con la que Nuria Orol fue asesinada la semana pasada.
Poco después de las diez de la mañana, los agentes llegaron al puerto y se desplegaron en los alrededores de la calle Gabriel Roca número 2, donde vivía la víctima. A partir de ese momento, los funcionarios se dividieron en grupos y comenzaron a registrar amplias zonas. Primero, la casa de Nuria y el jardín, reconstruyendo la posible huida del asesino.
En las inmediaciones se encuentra una enredadera de gran tamaño, y varios guardias, provistos de rastrillos, buscaron en el interior, en busca del arma homicida, que podría ser un cuchillo o unas tijeras. De forma paralela, otros grupos inspeccionaron pozos negros de la zona, por si el criminal se había deshecho del arma en uno de estos compartimentos.
Durante la operación, la Policía Judicial utilizó un detector de metales. Varios de los agentes se enfundaron los trajes blancos de la Policía Científica y se colocaron mascarillas.
Cerca de la casa de Nuria Orol se encuentra el aparcamiento de un supermercado, y la Guardia Civil también peinó aquellas instalaciones.
Cámaras
Los investigadores también han averiguado que una inmobiliaria del Port posee una cámara de seguridad que controla la entrada al local y que, el día del crimen, pudo grabar la huida del asesino. La cinta, pues, será inspeccionada, al igual que ya hicieron con otra cámara de unos apartamentos próximos.
La Benemérita también está investigando si Zouhair A. le propinó una paliza a su ex novia semanas antes del asesinato, tal y como han declarado varios testigos en la Comandancia de Palma. Estas personas aseguran que el marroquí le propinó patadas a Nuria al tiempo que la insultaba y la acusaba de ser una toxicómana.
El acusado sigue ingresado en la cárcel de Palma, a pesar de que él sostiene que es inocente y no se ha encontrado todavía el arma del crimen. Sin embargo, en sus diferentes declaraciones ha incurrido en contradicciones y mentiras, lo cual se interpreta como una prueba inculpatoria importante contra él.