A última hora de ayer, un vecino de Lloret localizaba el cuerpo sin vida de un varón en una zona boscosa del municipio. El cadáver apareció en un bosque situado en la carretera vieja de Sineu, concretamente en el punto kilométrico número 26.
El hallazgo se produjo de manera casual y el cuerpo se encontraba tapado con una manta y boca abajo. El residente no quiso tocar nada y alertó de inmediato a los equipos de emergencia.
Rápidamente, numerosas dotaciones de la Policía Judicial de la Guardia Civil, la Unidad de Mecanización (Policía Científica) y el Grupo de Homicidios se personaron en el lugar del suceso.
Violencia extrema
A su llegada, los investigadores no tuvieron ningún género de dudas, se trataba de una muerte violenta.
El cuerpo presentaba signos evidentes de violencia extrema, de hecho, se encontraba en ropa interior y con la cabeza totalmente cubierta con cinta americana de embalaje.
Fuentes próximas a la investigación confirmaron que la víctima coincide plenamente con las características físicas de José Alameda, un hombre de 52 años de edad que desapareció de su casa de La Soledad, en Palma, el pasado jueves.
En la vivienda registrada por el CNP en dicha barriada se localizaron varias bridas y cinta americana y estaba todo revuelto.
Todo apunta a que la violencia utilizada fue extrema, pero lo que los investigadores parece que tienen claro es que la muerte no se produjo en el lugar del hallazgo. Es decir, que pudo ser brutalmente asesinado en otro lugar y llevado con posterioridad hasta el bosque para tratar de ocultarlo.
La jueza de guardia de Inca se desplazó hasta el lugar del suceso y ordenó el pertinente levantamiento del cadáver aproximadamente sobre las 23.45 horas.
A partir de ese momento, los investigadores del Cuerpo Nacional de Policía y de la Guardia Civil trabajan conjuntamente para el esclarecimiento del caso, dado que las investigaciones se han cruzado.