Agentes del Cuerpo Nacional de Policía procedieron a la detención de dos integrantes de un grupo de trileros de s'Arenal como autores materiales de una agresión a un agente de policía de paisano al cual reconocieron de una redada en Son Banya.
Los hechos se remontan al pasado domingo. Una agente iba en compañía de un amigo suyo por la carretera del Arenal cuando observaron a un grupo de doce personas realizando el timo del trile. El policía y su amigo acudieron al lugar y advirtieron a los turistas que se trata de un timo en toda regla.
Reconocido
Acto seguido, los delincuentes desmontaron el puesto y se encararon con el agente y su compañero. En un momento dado, uno de los trileros reconoció al policía y gritó: «ese es el policía que ayer nos jodió en Son Banya» (haciendo referencia a la intervención policial en el marco de la 'operación Guaraná' realizada en el poblado el día anterior).
En ese momento, se desató la violencia extrema y varios integrantes del grupo de trileros empujaron al policía y a su compañero. Fue entonces cuando uno de los detenidos se sacó la camiseta y, tras meter una piedra de grandes dimensiones, la ondeó e impactó en la cabeza del policía provocándole una herida sangrante en el cuero cabelludo que requirió de sutura y ser atendido en un centro hospitalario.
Visiblemente afectado los dos jóvenes consiguieron salir de allí y abandonar el lugar.
Una vez atendido, el agente se desplazó hasta la comisaría donde una vez consultadas las bases de datos de los delincuentes habituales consiguió identificar a los agresores.
El autor material de la agresión ha sido identificado como Francisco C. G.F., de 21 años de edad.
Del mismo modo, una vez tramitada las diligencias, en la comisaría de Platja de Palma consiguen identificar a otro de los autores de la agresión y localizan a Enrique P.D., de 34 años y lo detienen.
Desde que se ha intensificado la presencia policial en la zona, fuentes próximas a la investigación, apuntan que entre el colectivo de carteristas y trileros hay cierto nerviosismo, llegando incluso a atentar contra un agente de la autoridad.
En esta ocasión, la profesionalidad del agente implicado que, sin ningún tipo de dudas, identificó plenamente a sus agresores condujo a la detención de los mismos en un tiempo rércord.
En las próximas horas está previsto que el presunto agresor sea puesto a disposición judicial.