La Policía Local de Calvià ha previsto intensificar este verano la lucha contra la venta ambulante en las playas. Para ello ha dedicado una unidad especial, formada por un oficial y siete policías, que está operativa desde las diez de la mañana hasta las siete de la tarde, exclusivamente para las playas, durante todo el verano. Los agentes centran su actividad contra los vendedores de fruta, de refrescos, de gafas de sol y otros artículos, así como contra las personas que ofrecen masajes, que en su mayoría son de nacionalidad china.
Los agentes disponen de quads -motos de cuatro ruedas- para poder moverse mejor por la arena. Desde el inicio de la temporada alta han incoado un gran número de actas e incautado fruta y refrescos a estos vendedores ilegales. Uno de los agentes comentó: «perseguimos esta actividad porque es ilegal, pero también se da la situación de que algunos de estos vendedores acaban robando carteras o efectos de valor a los turistas y éste es uno de los problemas de la venta ambulante».
Los vendedores ambulantes, ante la presencia policial, se han organizado y mientras algunos recorren la arena otros esperan desde el paseo vigilando si llega la policía para avisarse por el móvil.