Los abuelos de Ainhoa, la niña de ocho años fallecida por presuntos malos tratos de su madre y su compañero sentimental, habían iniciado los trámites para obtener la custodia de la pequeña ante el temor de que le pudiese pasar algo. La pequeña solía estar entre semana con sus abuelos en Andratx y pasaba los fines de semana con su madre y el compañero sentimental en es Coll den Rabassa. La madre, Antonia M.D., de 29 años, se trasladó a vivir a casa del joven, Miguel Angel G.L., de 28, hace aproximadamente un año.
Desde entonces, Antonia empezó a mostrar más que interés por su hija que en los años anteriores. No obstante, también empezaron los episodios de supuestos malos tratos sobre la pequeña. Cuando la menor volvía con sus abuelos, éstos, al ver las lesiones que presentaba, la acompañaban al PAC de Andratx, donde acudió en más de 20 ocasiones. La mujer, al parecer, tenía a sus padres y abuelos de la pequeña amenazados, diciéndoles que si decían algo se quedarían sin ver a la niña.
Tras unos meses, los abuelos iniciaron los trámites para obtener la custodia. Cuando se produjo la presunta agresión mortal a Ainhoa, el pasado fin de semana, los abuelos hacía ocho días que no tenían noticias de la pequeña, y ésta también había dejado de ir al colegio en Andratx, a pesar de que las clases no habían terminado, porque su madre se le había llevado al piso de es Coll den Rabassa. Los agentes investigan se este hecho se debió a una venganza de Antonia contra sus padres por querer tener la custodia de Ainhoa.
Tras la agresión, Ainhoa y Miguel Angel fueron detenidos e ingresaron en prisión tras declarar en el juzgado de guardia.
Entierro
A las 13.00 horas de ayer se llevó a cabo el entierro de la pequeña Ainhoa en el cementerio nuevo de Andratx, en un acto íntimo. El padre biológico de Ainhoa, que se trasladó de Barcelona a Mallorca al ser informado de la muerte de su hija quiso dar las gracias «por las muestras de cariño recibidas estos días por parte de la gente» y evitó pronunciarse sobre la tragedia porque «todo lo que se tenía que decir de Ainhoa ya se ha dicho».
A las 20.00 horas se ofició el funeral por la muerte de la pequeña en la iglesia Santa María de la Mayor en Andratx. A la ceremonia asistieron cientos de personas que quisieron mostrar su solidaridad con la familia.