La Platja de Palma se ha convertido en una auténtica jungla. Fruto de la misma, al mediodía de ayer, un grupo de vendedores ambulantes agredieron a un agente de la Policía Local cuando estaba desempeñando sus funciones de vigilancia.
Los hechos se produjeron sobre las 13.30 horas cuando, según varios testigos presenciales, a la altura del Balneario número 6, sito en la Platja de Palma, un policía trataba de identificar a un vendedor ambulante. En ese momento, el ciudadano de color se negó y no quiso mostrarle su documentación. Fruto de la discusión el vendedor ambulante golpeó al agente y lo tiró al suelo. Acto seguido, varios comerciantes de la zona y ciudadanos que presenciaron los hechos acudieron en ayuda del agente al ver que estaba solo y rodeado por varios vendedores de color.
Al mismo tiempo, uno de los comerciantes llamó a la policía y comunicó la agresión de su compañero. Rápidamente, numerosos efectivos de la Policía Local y del Cuerpo Nacional de Policía se personaron en el lugar y consiguieron detener al presunto agresor e identificar al resto de vendedores.
El policía, cumpliendo con su protocolo, fue conducido a la mutua para que se expidiera el correspondiente parte médico. Afortunadamente, el policía no sufrió heridas de consideración y todo se saldó con alguna contusión y dermoabrasiones por algunas partes del cuerpo.
Algunos de los ciudadanos que ayudaron a los agentes han sido gravemente amenazados por los vendedores ambulantes y han presentado la correspondiente denuncia por amenazas de muerte.
Los comerciantes reclaman urgentemente la presencia de unidades de élite en la zona.
Al detenido se le imputa un delito de resistencia a la autoridad.