El Servicio Marítimo de la Guardia Civil capturó al mediodía de ayer un tiburón de dos metros que se encontraba desorientado en aguas de la bahía de Palma, junto a unos barcos amarrados. Los agentes buscaban a la tintorera desde el sábado, cuando unos pescadores la detectaron en Can Pastilla.
A las doce y cinco minutos la lancha S-16, una semirrígida de 12 metros de la Benemérita, se dirigió hacia el Club Náutico de Palma, donde había sido visto el escualo. Además de los funcionarios policiales, en la embarcación iba un biólogo de la conselleria d'Agricultura i Pesca.
Desorientado
El tiburón, un ejemplar joven de macho de unos dos metros de longitud, estaba desorientado y los agentes pensaron que se había golpeado con el casco de alguna embarcación. Al principio, cuando descubrieron la aleta entrando y saliendo del agua, sospecharon que se trataba de un peregrino, pero después confirmaron que era una tintorera, una especie relativamente habitual en aguas del Mediterráneo.
Después de varios intentos los guardias civiles consiguieron anudarle un cabo de cuerda en la cola del escualo, que se mostró muy nervioso y lanzó dentelladas mientras duraba la operación. La Benemérita contactó con varios organismos expertos en especies de mar y confirmaron que ese ejemplar no podría vivir en cautividad, por lo que decidieron remolcarlo mar adentro, para luego liberarlo a bastantes millas de la bahía de Palma. El tiburón, una vez libre, reaccionó enseguida y se escabulló de la lancha en segundos.
En cualquier caso, en los próximos días las lanchas del Servicio Marítimo de la Guardia Civil tienen previsto patrullar por la bahía por si el tiburón vuelve a aparecer, posibilidad que parece bastante remota. Los investigadores creen que, o bien se encontraba desorientado, o bien llegó al puerto siguiendo a barcos atuneros.