La Policía Local de Palma ha detectado en los últimos días un aumento considerable en los robos, sustracciones y actos vandálicos perpetrados contra el servicio público Bicipalma.
A pesar de incrementar la vigilancia y de los controles de seguridad con los que cuenta el servicio de alquiler de bicicletas del Ajuntament de Palma, los ladrones y vándalos no dan tregua a los empleados de Cort.
Según fuentes policiales a la que ha tenido acceso Ultima Hora, parece que los delincuentes han conseguido hacerse con un método por el que desenganchan las bicicletas del anclaje de las estaciones de recogida y devolución.
En los últimos días, la Policía Local de Palma ha tenido que acudir a numerosos servicios y el robo de las mismas ha incrementado.
En la madrugada de ayer, en la calle Pedrera número 6, es decir, la vía que une el Passeig Marítim y Gomila, en una obra en construcción, un grupo de jóvenes estaba haciendo 'botellón' y, junto a ellos, un total de cinco bicicletas públicas tiradas en el suelo con daños de consideración. En esta ocasión, afortunadamente la rápida actuación policial evitó la sustracción.
En la calle Son Damas, en la barriada de La Soledat, el equipo de mantenimiento tuvo que recoger una bicicleta totalmente destrozada, las ruedas arrancadas, sin sillón y el cuadro totalmente destrozado.
Según los policías, esta situación no es algo esporádico. «Cada día nos llaman varias veces por temas relacionados con el robo de bicis. Lo más habitual es que aparezcan en el torrente o por las afueras», concluye el agente.
Los policías también han tenido que interceptar bicis circulando por le marítimo a altas horas de la noche con jóvenes que se van de marcha. Cabe destacar que el servicio es únicamente diurno.
Cada una de las 336 bicicletas cuestan unos 200 euros, pero hay que añadirles los más de 2.380 euros de los costes de implantación. Es decir, que supone unos 800.000 euros en total a los que hay que añadirles 150.000 euros de la gestión de los seis primeros meses de implantación.