Dos hombres armados asaltaron en la noche del viernes al propietario de un bar de Lloseta y después lo dejaron maniatado para emprender la huida.
Los hechos se produjeron a última hora de la noche cuando, según las primeras investigaciones a las que ha tenido acceso Ultima Hora, dos extranjeros (posiblemente ciudadanos del Este) abordaron al dueño del bar La Mina, le encañonaron con una pistola y le obligaron a que entrase al local que estaba con la barrera a medio bajar.
Acto seguido, le amenazaron y le obligaron a que le entregara la recaudación y todo el dinero que tuviese en el establecimiento.
Una vez dentro, el propietario fue retenido en contra de su voluntad por un espacio de aproximadamente unas tres horas, aunque la exactitud del tiempo que permaneció secuestrado no se sabe con exactitud y podría rondar entre las dos y las cuatro horas.
Al parecer, unos familiares de la víctima al ver que no regresaba a su domicilio decidieron dar aviso a la policía. Al personase al local una patrulla se percataron que el hombre permanecía maniatado en el interior del bar.
Botín
Según los primeros cálculos se estima que los atracadores se pudieron llevar un botín de unos 1.500 euros en efectivo.
Rápidamente, numerosas dotaciones de la Policía Local de Lloseta y de la Guardia Civil se personaron en el lugar de los hechos y tomaron declaración a la víctima.
Todo apunta a que los asaltantes perpetraron el golpe a cara descubierta y provistos, uno de ellos de una pistola y el segundo de un cuchillo, de grandes dimensiones.
Ahora, agentes de la Policía Judicial de la Guardia Civil, responsables del caso, tratan de atar los cabos sueltos y esclarecer lo que sucedió en el interior del bar por espacio de las tres horas que duró presuntamente el secuestro.
El propietario del establecimiento hace poco que regenta el bar y no conocía de nada a sus asaltantes. Varios vecinos comentaron, «seguro que estaban vigilando y cuando vieron que cerraba el bar y estaba solo aprovecharon y le robaron», concluye.