Eran las 21 horas del pasado miércoles cuando un joven, de 18 años de edad, estaba junto a un grupo de amigos practicando artes marciales en el polideportivo Príncipes de España. Al salir, el chico se percató de que había un menor de edad, concretamente de 14 años, sobre una moto de similares características a la que, cuatro días antes, le habían robado. De hecho, consta una denuncia de robo presentada el día 20 en la Guardia Civil. El chico se dirigió, en compañía de su grupo de amigos, a por el presunto delincuente y le emplazó a que le devolviera el vehículo.
El menor, se negó e intentó darse a la fuga. A partir de ese momento hay diferentes versiones de lo que sucedió. El legítimo propietario de la moto reconoció ante la policía que le había propinado un puñetazo en la cara al menor para evitar que se fugase y así poder recuperar la moto. Algunos testigos afirmaron que un gran número de personas rodearon al presunto ladrón y le propinaron una paliza. Debido a las lesiones que presentaba el menor, se solicitó la presencia de una ambulancia. El SAF (Servicio de Atención a la Familia) de la Policía Nacional se ha hecho cargo de la investigación.