El GREIM no descansa. El Grupo de Rescate e Intervención en Montaña de la Guardia Civil, tras el operativo para buscar al hijo de Bruno Kreisky, que finalmente apareció sin vida en Na Burguesa, participó en otros dos rescates: el primero en sa Fosca y el último en la Punta de N'Amer, en Sant Llorenç.
La madre de uno de los excursionistas de sa Fosca se puso en contacto con los equipos de emergencia porque no sabía nada de ellos, y cuando el GREIM sobrevoló la zona los bomberos ya actuaban por tierra. Al final, uno de ellos pudo salir y otros dos fueron ayudados, ya que uno tenía un tobillo lesionado. Sin casi tiempo a descansar, al equipo de montaña le surgió otra alarma: en Sant Llorenç había desaparecido un hombre de 80 años que había ido a pescar a las rocas de la Punta de N'Amer.
Agentes de la Benemérita, Policía Local, bomberos y familiares del desaparecido, se movilizaron, hasta la medianoche, cuando el GREIM encontró el coche del octogenario en Cala Petita. Poco después se localizó al anciano, con síntomas de hipotermia por las bajas temperaturas y algunas contusiones en el cuerpo. El personal de una ambulancia del 061 lo atendió de urgencia. Si los equipos de rescate tardan unas horas más en encontrarlo, posiblemente ahora estaría muerto.