Agentes de la Policía Local de Andratx y la Guardia Civil han abierto una exhaustiva investigación para tratar de aclarar el supuesto asalto, robo y agresión sexual sufrida por una británica de 20 años en Andratx.
Los hechos, según las primeras hipótesis de la investigación, se remontan a las seis de la madrugada del pasado viernes al sábado. Al parecer, la víctima, una británica residente en el municipio de Andratx, se encontraba de fiesta junto a unas amigas en una conocida zona de ocio del Port d'Andratx.
Al finalizar la fiesta, la chica decidió marcharse hasta s'Arracó a casa de una amiga donde tenía pensado pasar la noche. En el trayecto comprendido entre Andratx y s'Arracó, concretamente en la carretera de s'Estret, la joven caminaba totalmente sola, algo bebida y por una zona peatonal de una visibilidad muy deficiente. Cuando la británica se encontraba a mitad del trayecto, un vehículo se paró junto a ella, bajó un varón de unos 50 años de edad y supuestamente la asaltó, le robó y la agredió sexualmente sin llegar a penetrarle debido a la resistencia que presentó la joven.
Ayuda
La chica, con grandes dificultades, consiguió llegar hasta la vivienda de su amiga. Una vez allí le contó lo que había sucedido y decidieron acudir hasta las dependencias de la Policía Local de Andratx para formular la pertinente denuncia. Al mismo tiempo también se alertó a la Guardia Civil, que se hizo cargo de la investigación.
Varios agentes se desplazaron, con suma celeridad, hasta la zona donde la víctima informó que se produjeron los hechos y localizaron parte de los enseres de la chica esparcidos por el suelo, pero no apareció la cartera.
Rápidamente, la joven británica fue conducida hasta el PAC de la localidad donde la visitó en primera instancia un facultativo quien decidió realizar el traslado hasta el Hospital Universitario de Son Dureta.
Por el momento, según informaciones a las que ha tenido acceso Ultima Hora, todo apunta a que la víctima forcejeó con su presunto agresor y consiguió evitar la penetración, pero sí que se habría producido una agresión sexual.
Quejas
Numerosos vecinos, nada más conocerse la noticia, han denunciado públicamente la falta de iluminación de la zona. «Se trata de un paseo peatonal de unos cuatro kilómetros donde algunos días hay poca iluminación, pero otros días no hay ninguna. Es una vergüenza», concluye un residente visiblemente indignado.
La Guardia Civil y la Policía Local prosiguen sus investigaciones y no se descarta que en los próximos días se produzca alguna detención en referencia al caso.