El niño que apareció muerto en el interior de una maleta en Maó era de habla castellana y junto a él se encontró una tarjeta de embarque, según ha averiguado el Grupo de Homicidios de Palma, que se ha hecho cargo de la investigación.
La unidad policial de élite está volcada en la resolución del caso, y cuenta con el apoyo de la Policía Científica. Tal y como adelantó ayer Ultima Hora, en el equipaje personal del menor se encontraron cómics del tipo manga en español y cromos, también en el mismo idioma. Esta circunstancia hace creer a los investigadores que el niño era, casi con toda seguridad, de habla castellana. La ropa que llevaba era la siguiente: unos vaqueros, bermudas, una camiseta de manga corta y un chándal.
Reloj y tarjeta
Dos detalles que pueden ser claves para el esclarecimiento de los hechos es que se ha encontrado en el asa de la maleta roja una tarjeta de embarque, aunque está muy deteriorada y carcomida. También ha aparecido un reloj digital del niño, de estética infantil y que puede acotar mucho las posibilidades. En la maleta se han encontrado también lápices de colores y unos cubiletes pequeños de metacrilato con una araña y un escorpión en el interior.
La muerte del menor le sobrevino entre uno y tres años atrás y los especialistas calculan que la víctima tenía entre 10 y 13 años de edad. La portavoz de prensa del CNP informó ayer que el hecho de que el cuerpo se haya descompuesto en el interior de la maleta de viaje, lo que significaría que no se han recogido los huesos de algún lugar para depositarlos en la maleta, sino que llevaban ahí desde que falleció el menor, por lo que se descarta una exhumación de un cadáver.
Sin embargo, precisó que esta circunstancia tampoco significa que haya muerto en el interior de la maleta, sino que pudo haber fallecido antes y haber sido, posteriormente, introducido en la misma, teniendo en cuenta que es de un tamaño suficiente como para que las compañías aéreas obliguen a facturarla. Los investigadores confían en la colaboración ciudadana para esclarecer el caso. De hecho, destacan que la actividad en el paraje donde apareció la maleta es muy escasa, por lo que algún vecino pudo ver algo extraño años atrás y ahora esa información sería de gran valor. El ADN extraído a la víctima está siendo comparado con el de los niños desaparecidos en España en los últimos años. La sección de Antropología de la Comisaría General de la Policía Científica de Madrid es la encargada de filtrar el perfil genético.