En la mañana de ayer cuando el rector de la iglesia dels Dolors de Manacor, Andreu Genovart, abrió las puertas del templo a los feligreses se encontró con un hombre herido en el interior del templo que pedía ayuda.
La noche anterior este individuo, de 30 años y con antecedentes por robo, saltó una barrera de unos cinco metros de alto que da acceso a la escuela antigua, uno de los pocos flancos de l'església gran que no tiene alarma de seguridad. De allí, tiró una puerta para accder a la zona del órgano antiguo y entró en el templo.
Según cuenta el rector, «suponemos que intentó bajar hasta la nave, por una vieja escalera de madera, y con toda probabilidad de allí se precipitó al suelo golpeando algunas maderas en su caída». Este accidente le dejo malherido y tuvo que permanecer toda la noche en el interior del templo hasta que lo encontraron por la mañana.
Según Genovart se descarta que quedará en el interior a la hora de cerrar ya que «se mira en todos los rincones, capilla por capilla antes de cerrar y todas las puertas excepto la señalada cuentan con alarmas». El rector también señaló que «al encontrarlo tenía una almohada que seguramente se ha acercado para poder dormir con más comodidad en el interior del templo».
El herido fue trasladado al hospital por la Policía Local de Manacor después de que Genovart diera el aviso y practicará las primera in situ curas al herido.
En el templo no se hechó en falta nada lo que daría más valor a la hipótesis de su caída nada más entrar en el templo. Asimismo en la noche de ayer los rumores que corrían por la ciudad de Manacor ya señalaban que este individuo había quemado algunos tapetes para poder más la noche más caliente, y había realizado algunos destrozos en el interior del templo, unos hechos que desmintió el rector.