Unos cuarenta policías locales interinos del cuartel de San Fernando, en Palma, serán cesados en breve y otros agentes que han accedido a su plaza ocuparán su lugar. El asunto ha provocado una considerable polémica en el seno de la Policía Local.
«Es vergonzoso y lamentable que un ayuntamiento como el de Palma pretenda echar a más de 40 agentes en plena crisis y con unos altos índices de delincuencia», afirma uno de los afectados. «Se puede decir más alto, pero no más claro. Resulta que, desde hace años, Palma tenía en su plantilla aproximadamente unos 163 policías interinos. Ahora, 34 han ocupado plaza fija y otra parte serán reemplazados por otros interinos y el resto nos echan a la calle», añade otro agente.
Malestar
Los profesionales quieren hacer llegar a la opinión pública su malestar y transmitir «que los delitos están aumentado, las barriadas palmesanas se degradan de cada vez más y la Platja de Palma es un auténtico descontrol y la manera de combatir dicha situación es la de echar a la calle a los agentes experimentados», concluyen.
Una de las unidades más afectadas por los próximos ceses es la nocturna. Un total de 28 agentes serán cesados y tendrán que abandonar sus puestos de trabajo. Desde Cort, sin embargo, se sostiene que todas esas plazas serán cubiertas en poco tiempo.
Según fuentes consultadas por Ultima Hora, las diferentes comisarías de distrito han recibido un fax por parte del departamento de Recursos Humanos en los que se informa que los interinos afectados deberán disfrutar de sus días de vacaciones y días debidos antes del día uno de noviembre.