La madrugada del sábado al domingo fue bastante 'movida' en el Port de Pollença y los agentes de la Policía Local y de la Guardia Civil fueron requeridos en poco tiempo en tres peleas de jóvenes que se encontraban en locales de ocio del núcleo turístico.
El altercado más grave tuvo lugar alrededor de las 04.40 horas en la zona del Club Náutico. Al parecer, un joven mallorquín que veranea en el puerto tuvo una discusión con un británico de 20 años que está de vacaciones en la zona. De las palabras pasaron a las manos y el joven mallorquín, de unos 23 años de edad, recibió varios golpes en la cabeza, por lo que sufrió un traumatismo craneoencefálico. El personal de una ambulancia lo asistió en el lugar y después lo evacuó hasta el hospital de Inca, donde se le efectuó un reconocimiento médico.
Amigos de los dos implicados también se enzarzaron en una pelea y hubo algún que otro lanzamiento de botellas y sillas. El personal de seguridad del Club Náutico avisó del altercado a la Policía Local y a la Guardia Civil.
Los agentes llegaron al lugar y se entrevistaron con varios testigos. Poco después procedieron al arresto del británico de 20 años, el cual opuso resistencia y tuvo que ser reducido por varios agentes. Al introducirlo en el vehículo policial uno de los agentes resultó herido. El varón, fue trasladado al cuartel de la Guardia Civil para prestar declaración acerca de los motivos de la agresión y una vez concluidas las diligencias será puesto a disposición judicial.
Unos veinte minutos después, también se requirió la presencia policial en otro bar del puerto debido a un altercado, en el que había un hombre que portaba una navaja. Este individuo, de nacionalidad rumana, es conocido por los agentes ya que ha estado implicado en diversos incidentes. Cuando los agentes llegaron al lugar, el hombre que portaba la navaja se había marchado, por lo que se facilitó su descripción por radio para tratar de localizarlo. Posteriormente, una patrulla de la Guardia Civil lo interceptó en el Port d'Alcúdia.
Los agentes tuvieron que intervenir también en un tercer altercado en otro bar, aunque en esta ocasión el problema se solventó en breve y no hubo que lamentar heridos ni hubo detenciones.