Un juzgado de Palma ha decretado el ingreso en prisión de un hombre que intentó incendiar, por una venganza laboral, una nave que contenía más de 50.000 litros de sustancias químicas, lo que hubiera producido una nube tóxica de grave riesgo para las personas y el medio ambiente.
Javier C.B., con cuarenta antecedentes policiales, intentó quemar la nave industrial después de una discusión con el propietario del negocio, con el que había discutido por un desacuerdo sobre un trabajo de piscinas realizado.
Los hechos ocurrieron a la una de la madrugada del 4 de agosto en una nave industrial dedicada a la distribución de productos químicos situada en el polígono industrial «Can Valero» de Palma.
Según la Jefatura Superior de Policía de Baleares, Javier C.B. accedió al recinto de dicha nave a través de una verja con trece garrafas de gasolina que contenían diez litros cada una de ellas.
A continuación fue repartiendo las garrafas por todas las naves, los camiones de reparto y junto a un bidón que contenía sustancias químicas. Después de verter todo el contenido de gasolina, prendió fuego a una antorcha de fabricación casera y la arrojó al suelo, lo que originó una fuerte deflagración que extinguió el incendio.
De esta forma, el fuego no llegó a propagarse al resto del recinto. A causa de la explosión, el autor del incendio huyó del lugar.
Según la Policía, en la nave había acumulados 50.000 litros de distintos productos químicos, que de haberse incendiado hubiera producido una nube tóxica de «gas cloro» que hubiera supuesto un grave peligro para las personas y el medio ambiente.
Según la policía, el detenido pasó a disposición judicial el pasado jueves y el juzgado decretó su ingreso en prisión por un delito de incendio.