La Policía Nacional de Madrid ha detenido a un hombre que intentó degollar a otro en un bar de la zona de Gomila (Palma) con un arma blanca cortante, la cual no se ha podido identificar, y con la que provocó a la víctima heridas de gravedad en el cuello.
Fuentes de la Policía han explicado que la víctima, que fue atacada por la espalda, pudo salvar la vida porque el agresor no ejerció presión hacia dentro cuando le cortó en la zona del cuello. El médico que le atendió certificó que presentaba tres heridas en la cabeza, de las que destacaba la del cuello, de entre siete y nueve centímetros.
Los hechos se remontan al 22 de abril de este año, cuando víctima y agresor se encontraban en un bar de la zona de Gomila. Al parecer, el agresor, un marroquí de 49 años que responde a las iniciales de M.D.M llegó al local sobre las 9.30 horas y consumió algunos combinados. La víctima, un hombre de 38 años supuestamente palestino -no ha presentado documentación en ningún momento que acredite su nacionalidad- llegó un rato después.
Un empleado del bar señaló a la Policía que ambos hombres se conocían de vista de haber coincidido en anteriores ocasiones por el local. El testigo explicó que ambos hombres se saludaron de manera cordial y permanecieron en el local hasta alrededor de las 11.30 horas, cuando únicamente estaban en el local ambos hombres, el empleado y otro cliente, los únicos testigos del suceso.
El camarero relató que oyó un grito desde el almacén y cuando salió se encontró a la víctima con la mano en el cuello y un importante un corte del que salía abundante sangre. Este trasladó al herido al PAC más cercano, al tiempo que dio parte del suceso a la Policía.
La víctima contó en su declaración que fue atacada por la espalda de manera sorpresiva, de manera que ni siquiera pudo ver el arma con el que fue herida. Seguidamente, el agresor se dio a la fuga y no pudo perseguirle.
La Policía no pudo localizarle en un principio, si bien el Grupo de Homicidios lo identificó con posterioridad y montó un operativo de vigilancia intenso, el cual no tuvo éxito, por lo que pensaron que el sospechoso había abandonado la isla. Por esta razón, los agentes pusieron una orden de búsqueda de difusión nacional gracias a la cual el agresor fue detenido en el aeropuerto madrileño de Barajas cuando trató de coger un vuelo internacional.
La Policía detuvo el pasado martes al sospechoso, quien probablemente se encuentra en prisión en estos momentos. El hombre en cuestión cuenta con un historial de once antecedentes que datan desde 1995 el primero de ellos, cuando fue reclamado judicialmente en Palma por una infracción de la ley de extranjería. Asimismo, también se le han imputado con anterioridad un delito de abuso sexual, atentado contra la autoridad, tráfico de drogas, daños y desorden público, entre otros. Además, el detenido ha utilizado hasta seis nombres distintos. No obstante, actualmente no tenía ninguna reclamación judicial pendiente.